Mi primer Relato .."Daniel de la guarda"

Hola a todos mi nombre es Jorge Andres Rojas , mas conocido como Andrew. Acabo de incribirme a este foro con la meta de poder cumplir un sueño que tengo desde hace mucho : publicar las historias o cuentos que desde hace mucho vengo escribiendo. Algunas de ellas aun son solo bocetos o resumenes que aun tengo que mejorar pero me gustaria que poder hacerlas publicas y bueno ...escuchar de todo ...quisiera saber si tengo madera para escribir porque por ahora esto es solo un divertido Hobbie que encontre, pero me emociana la idea de pensar en que puedo compartir con el mundo mis relatos ...

ojala les guste este primer relato y pronto subiere algunas de mis obras recientes y quiza con suerte pueda saber las opiniones de aquellos curiosos (por ahora ....espero XD) que entren ... Nos vemos


cap. 1 - El milagro.


Todo comienza con uno de esos días de Marzo. Un día como cualquiera de ese mes del año, medio templado, medio frío a veces, con ratos de sol. En las calles la gente transcurre normalmente y se ocupa de sus cosas y problemas. Por una gran avenida principal, Raúl Revilla regresaba de un largo medio día en el cementerio junto a sus sobrinos Julián y Clara que habían ido a visitar a sus padres. El tío Raúl había perdido a su hermano Carlos y a su cuñada Susana en un accidente de transito hacia ya 8 años y la idea de una visita anual al cementerio no era muy grata para los chicos, ahora de 16 años.

En aquel momento solo reinaba el ruido del motor y las ruedas el automóvil desplazándose por la pista. Julián, un muchacho normal, algo blanquiñoso, de cabello oscuro, ojos marrones y de contextura desarrollada por el deporte, miraba un solo punto de la ventana de la puerta del auto a su lado. Clara por su lado, de tes mas pálida, delgada y esbelta, de largo cabello lacio castaño y ojos grises jugueteaba, miraba su reloj y observaba de reojo a su tío por el retrovisor .el clima no era el mejor hasta que el tío decidió comenzar la charla.

-¿Hoy no es uno de esos días agradables verdad? Pero yo se que sus padres estarían orgullosos de ustedes – menciono el tío Raúl un tono de animo. Julián y Clara solo atinaron a mirar al mismo tiempo a su tío mientras este conducía y enmudecieron nuevamente (¡como si hubieran dicho miles de palabras!).
- Tío yo se que quieres ayudar pero ¿no crees que deberíamos dejar pasar el tema? Ya estuvimos en el cementerio y con eso me basta para desmotivarme todo el día – concluyo Julián con algo de fastidio.
-¡No le hables así! Tío ignóralo, solo quiere estar con sus amigotes hablando de futbol y de las chicas de mi clase. Yo si me alegro…de ver todos los años a papa y mama – dijo clara sin mirar al tío a la cara. Me alegro entonces, insisto en que sus padres estarían muy felices de verlos así tan grandes y bien parecidos; tu Julián hecho todo un jovencito y Clara tu toda una señorita. Por mi parte yo si lo estoy – declaro el tío Raúl mirando a sus dos sobrinos que consideraba como sus hijos. El tío Raúl era un hombre de 40 años, de contextura gruesa, gran talla, barbado y de gran corazón, que hacia de todo por sus dos sobrinos, aunque a veces sintiera que no era como un padre.

-bueno creo que ustedes se bajan aquí – dijo el tío al detener el auto en una esquina .No olviden que los esperare aquí con el auto para ir a cenar en la tarde. Esta bien – respondieron los dos hermanos y se alejaron caminando.

¿Por que eres tan cruel con nuestro tío? El solo quiere ser mas amigo nuestro.- refuto Clara a su hermano. Y tú ¿Por qué le mentiste con eso del cementerio? A ti también te disgusta ir tanto como a mí – espeto Julián. Lo hice para que no lo abrumaras con tu indiferencia, además no te deberías comportar así con el si quieres obtener tu licencia de conducir .No me importa, hubiera querido que papa me ayudara con eso pero él no lo es. En fin, de aquí me voy a casa de Bruno, te veré entonces a eso de las 5 y media .Bien si fuera tu, yo dejaría esos ánimos, no te saldrá ninguna canción con se humor de perro – se burlo Clara de su hermano mientras se alejaba dirigiéndose a otra calle para ver a sus amigas. Julián iba a casa de Bruno, uno de sus mejores amigos y que juntos habían conformado una banda de música con otros chicos de su escuela. El ensayo era desde las 2 de la tarde hasta las 5 los lunes, miércoles, y viernes para no perder la práctica y para no descuidar los estudios.
El ensayo termino y todos se despedían desde el garaje de Bruno. ¡Julián espera! – persuadió Bruno a Julián antes de que se fuese. ¿Qué paso? Este fue el peor ensayo después de meses, no tocaste el bajo como siempre, ¿ocurre algo?
No es nada, son cosas mías, ya sabes algo de la escuela. Julián olvido por completo que su amigo estaba en la misma aula y que excusas como esa no servirían con su compañero del alma. Te conozco, creo que es porque fuiste con tu tío al cementerio ¿verdad? – acertó Bruno. Bueno es cierto, olvide que te lo había contado; es solo que no quería tocar mas el tema en todo el día, pero veo que me durara un par de horas mas – se resigno Julián, al fin y al cabo el día ya iba terminar y la noche seria más provechosa, nada que no pudiera calmar la Tv o la música de su Mp3. Tranquilo, y entenderé que te tomes unos días de descanso, pero eso sí : Ni se te ocurra dejarnos porque el próximo mes tenemos 2 presentaciones jejeje – rio Bruno tratando de mejorar el ánimo de su mejor amigo.

El muchacho había recibido suficientes consejos como para seguir con aquel sentimiento, pero mientras caminaba, Julián no pudo evitar volver a pensar en por qué no tenía padres. En ese momento empezó a llover. Con la chaqueta en la mano Julián corrió hasta la avenida principal para encontrar a su hermana; 15 minutos más temprano que él, parada bajo la lluvia que se había vuelto torrencial. ¡Cielos! Ya era hora ¡Te voy a matar!, porque me dejas esperándote aquí. ¿No vez que me estoy mojando? – gruño Clara tiritando de frio y no dudo en arrancarle de las manos la chaqueta a su hermano para cubrirse. Lo siento es que, bueno estaba pensativo y se me paso la hora pero, ¿que el tío no debería estar aquí ya? No sé porque los hombres siempre se demoran. No importa, llamemos a un taxi. Haciendo la seña los hermanos detuvieron a un taxista y subieron sin pensarlo dos veces al auto. ¿Que pasara si tío Raúl no nos encuentra? Sabrá que no lo pudimos esperar. No lo entiendo, el clima era perfecto antes de que sean las 4 y el pronóstico no anuncio nada por las noticias – pensó Clara mientras el auto arrancaba. Tienen dinero verdad mocos…. que diga….ejem… niños – dijo dubitativamente el taxista con cara de desconfianza. ¡Claro que sí! Usted solo siga de frente, no queremos que se choque con algo por culpa de esta lluvia – respondió Julián algo enfadado. No seas grosero, este señor solo es precavido- susurro clara pacíficamente al oído de su hermano ¿Vaya lluvia verdad? , nadie la esperaba, ni siquiera yo. Pero no se preocupen, yo soy muy buen conductor, les comento que saque mi licencia hace ya 20 años y nunca he tenido ni una multa. Con decirles que estuve en una competencia ilegal y….-

El taxista seguía charlando y volteaba a ver a los muchachos sin reparo alguno, o quizá temor pues los chicos sí que lo tenían al verlo conducir con tanta negligencia. ¡Oiga! Quiere fijarse por donde va. Nos está poniendo nerviosos, esta lluvia es terrible y usted podría – se quejo el joven cuando el auto sintió un movimiento brusco. El auto había hecho un giro para subir por el gran puente de la avenida 30 y se denoto la niebla en el horizonte. Por favor tenga cuidado – dijo la cándida y delicada chica tratando de no perder ese tono tan amable que siempre había hecho reaccionar a todo el que conocía a Clara Revilla. Entonces una luz brillo al final de puente como si fuese otro poste de luz con la diferencia de que este se apago desapareciendo. De pronto lo único que vieron Clara y Julián fue como el auto chocaba contra otro embistiendo al del frente.

Fue entonces la colisión por detrás por otro auto, pues se hallaban en una vía rápida. El auto giro varias veces y cayó por un lado del puente hacia la otra pista donde el transito ya se había detenido al ver el accidente. El hermano solo recordó al despertar del transe de la caída los gritos ensordecedores de su hermana al caer del puente. Julián trato de moverse cuando se vio atrapado junto con Clara entre los fierros retorcidos del automóvil, cuando en eso escucho el lamento del taxista y como este se había librado de las ataduras del taxi destrozado. Jadeante, el hombre se alejo sin importarle el resto de lo que quedo en el coche. ¡Hey! ¡No nos deje! Clara despierta debemos salir de aquí. ¡Reacciona ya! – revivió Julián a su hermana. Clara despertó y se vio la frente sangrante y desesperados los dos jóvenes intentaron salir del taxi hecho rayos. El sonido de la ambulancia ya se escuchaba a lo lejos. ¿Será la ambulancia o la policía? Quien sea que nos saque de aquí – pensó en milésimas de segundos Julián. Entonces pudo ver una luz encenderse desde una rendija que se creaba por los fierros torcidos. Clara pensó que era fuego y grito más fuerte que la última vez al verse presa con su hermano; si no salían de allí el auto iba a estallar. De pronto un gran ruido resonó en el lugar, como si un gran “algo” cayera del cielo contra la tierra. ¡Ah! El puente caerá sobre nosotros – grito la chica alterada. El olor a gasolina aumento y los nervios junto con él. Hubo un momento de silencio en el cual Julián vio en cuestión de segundos todo lo que había hecho en varios años, entre sus visiones, pudo ver a sus padres y antes de poder reaccionar escucho otro sonido más. “Algo” se poso sobre el taxi hundiendo mas el aplastado taxi atrapando a los hermanos mas y mas.

El grito que ensordeció a Julián no evito que viera un extraño suceso. Unos dedos blancos se abrieron paso entre los fierros y el metal soltando a los hermanos que se encontraban boca arriba y con las piernas en el aire. Al caer sentados, los hermanos Revilla vieron una gran luz blanca y de ella salir una mano que los invitaba a salir del peligroso lugar. Julián no dudo, al ver a Clara desmayarse; ALGUIEN DEBIA SALVARLOS. De lo que el chico pudo distinguir, se describía como alguien más parecido a un chico de blanco resplandor y de brazos vendados, que con gran fuerza los saco del auto y los coloco a un lado de la autopista. Era como un extraño sueño hasta que Julián no pudo creer lo que veía y sentía. Cientos de plumas blancas como la nieve eran movidas por el viento y la lluvia de la noche, que de pronto se desvanecieron junto con la lluvia. Moviendo su mano, Julián recogió una de ellas y sintió que era real. Volteo a ver y el ser no se había ido aun y estaba parado frente a él en medio de la autopista baja. El maravilloso ser miro a Julián y, luego dirigió su mirada hacia lo que quedaba del auto. Julián miro también el taxi, cuando de pronto este al fin exploto. El estallido fue muy fuerte pero estaban lo suficientemente lejos para verlo sin preocupación. ¡Gracias!... - fue lo único que atino a decir el muchacho intentando ver entre la luminosidad de las llamas y de lo que creyó haber visto. Pero al parpadear…. No había nadie más que él y Clara en medio de la pista.

Es entonces que supo que todo aquello había sido producto de dos cosas: O el golpe fuerte en la cabeza que había dejado una secuela en su mente, haciendo que se libre con superpoderes por la adrenalina y así haber podido salvar a su hermana; o un increíble milagro los había salvado y los había vuelto a la vida.





Daniel de la guarda

. ESpero que les guste el primer episodio y weno si me quieren contactar mi mail es andresr20035@hotmail.com...asi sabran el resto...y si puedo lo publicare aqui.